miércoles, 23 de mayo de 2007

La necesidad de ponerse las pilas


PLANIFICACIÓN TERRITORIAL: LA NUEVA AGENDA
EDITUR. 23/05/2007

La alianza empresarial Exceltur ha publicado recientemente un estudio en el que refleja una serie de "buenas prácticas" en materia de planificación turística dentro de las estrategias de planificación territorial de 15 destinos de sol y playa españoles. Dichas "buenas prácticas" detectadas hacen referencia a aspectos como la protección del paisaje, delimitación de zonas turísticas, densidades, niveles de edificación, planificación de infraestructuras de transporte, señalización turística, etc... (ver el informe completo aquí)

Sin embargo, el aspecto que más llama la atención es que de las 15 zonas consultadas, sólo 7 cuentan con una auténtica estrategia turística a medio y largo plazo. El hecho de que más de la mitad de los destinos carezca de una estrategia sólida definida obedece tanto a la falta de compromiso de una clase política marcada por los calendarios electorales como a la ausencia de un empresariado con voluntad, no sólo de implicarse en el desarrollo de estrategias, sino de hacer posible la viabilidad de proyectos con una mayor horizonte temporal que el marcado por la agenda política.

Son varios los destinos turísticos españoles que cuentan con modelos exitosos de parternariado público-privado en materia de gestión, promoción y comercialización. Dichas experiencias nos demuestran que si se quiere alcanzar la excelencia de cara al turista y consolidar la imagen de destino integrado la colaboración es más que necesaria. Porque tanto en la configuración de un producto, como en la gestión integral de la cadena de valor, así como en la imagen global de un destino intervienen de forma fundamental el sector público y la iniciativa privada.

Resulta fundamental que, si queremos hacer realidad conceptos como la calidad, la competitividad, la sostenibilidad..., el sector privado tome conciencia de su papel como impulsor activo de las iniciativas en materia de producto y comercialización; y que el sector público abandone el control absoluto de la competencia turística y pacte nuevas reglas de juego con la iniciativa privada.

La industria necesita que ambos se pongan las pilas lo antes posible.

No hay comentarios: